Como Dormir A Un Bebe De 3 Años
A los 6 o 7 meses un bebé duerme un total de 14 horas, repartidas entre dos siestas, una por la mañana y otra por la tarde; y luego un sueño nocturno que suele ser de 6 a 9 horas, interrumpidas por despertares breves. No te puedes imaginar cuántos padres como tú pasan por la misma situación noche tras noche. Ciertos niños duermen sin ningún género de problema siempre y cuando estén acompañados. Esto pasa con frecuencia en la infancia puesto que, según Rosen, “los hijos precisan sentirse seguros y a salvo y por ello desean que sus padres duerman con ellos o viceversa”. Para que el niño se relaje, es esencial eludir actividades que le puedan excitar durante esa última parte del día, entre ellas, los videojuegos y ver la televisión. Por su lado, la lectura de un cuento como última actividad del día —antes de apagar la luz y que el pequeño se quede solo en la cama—, contribuye a la relajación del pequeño.
El hecho de idear prácticas rígidas para la hora de acostarse le ayudarán a dormirse por su cuenta y a mantenerse dormido. En promedio, un bebé de 4 meses duerme entre nueve y once horas cada noche, y dos siestas diarias de dos a tres horas cada una. Este es un periodo de transición gradual que se extenderá hasta dos siestas del día a día. Los días en que tu bebé duerma sólo dos siestas, quizás tenga más o menos horas de sueño a lo largo de la noche. A los 7 meses, muchos bebés han dejado ahora la toma nocturna, pero otros siguen reclamándola. La razón es que cada niño sigue su ritmo a la hora de adoptar hábitos de sueño y alimentación.
¿De Qué Forma Conseguir Que El Niño Se Vaya A Dormir Sin Montar Dramas?
Tampoco es conveniente solucionar los problemas o hacer proyectos en el instante de acostarse. Reposar menos horas de las necesarias puede perjudicar la salud de los pequeños. Incluso podrían aparecer trastornos del sueño, bastante comunes en niños y adolescentes.
Son una válvula de escape para el niño que expresa de este modo sus miedos e inseguridades. Ocurre porque a esta edad el niño vive multitud de vivencias que aún no es capaz de absorber, y esto le hace tener un sueño intranquilo, a veces acompañado de miedos. A esto se une que aún no distingue entre la verdad y lo soñado. Si bien todavía no tenga edad para comprenderlos, puedes leerle uno de estos 18 cuentos para bebés, pues tu tono de voz contando las historias hará que se relaje. A los pequeños les gusta que ciertas cosas transcurran todos y cada uno de los días del mismo modo y en exactamente el mismo orden. El baño antes de cenar, la cena, hacer pis, ponerse el pijama…
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Si ya es difícil que, en general, los pequeños se vayan pronto a la cama, en este momento que a lo largo del confinamiento motivado por la crisis del coronavirus no tienen la posibilidad de salir de casa, lo es mucho más. La razón es que su actividad es menor y están menos cansados. A esta novedosa situación, se suma que muchos menores se alteran y se sostienen en un estado de excitación originado por los juegos de computador online o en la tableta. Como consecuencia, los pequeños se duermen y levantan tarde y se dificulta el cuidado de los horarios propios de una jornada escolar o laboral. No obstante, es esencial que los pequeños se vayan temprano a descansar, puesto que resulta primordial para su rendimiento escolar y sentido del humor.
Tu bebé está empezando a quedarse dormido por su cuenta, pero es probable que todavía necesite que le despierten para alimentarse durante la noche. Más allá de que el patrón de sueño está comenzando a regularizarse, todavía debes proseguirle la pista. Es demasiado pronto para establecer un horario, conque intentar imponerle uno no sería aconsejable.
Es recomendable que se confirmen límites claros (número de cuentos, canciones…) si el niño se protesta a la hora de quedarse solo. También hay que tener precaución de no beneficiar el miedo mencionando a “cocos”, al hombre del saco, etc. Ahora el niño es más con la capacidad de quedarse dormido por su cuenta. Es tiempo de entablar una pauta para hacerle dormir, la que va a funcionar en la noche y a lo largo de las siestas. Por ende, trata de cerciorarte de que la hora de acostarse y las siestas ocurran en el mismo horario y de la misma forma todos y cada uno de los días. Tu bebé recién nacido no conoce la diferencia entre el día y la noche.
En verdad, varios pequeños de esta edad duermen mejor con alguien mucho más en la habitación. Otro niño de 3 a 5 años sería un óptimo compañero de habitación. Los niños mayores comunmente tienen la posibilidad de dormir a la perfección casi con cualquier clase de alboroto.
El Ejercicio Asistencia Al Niño
No es recomendable que los niños se acuesten con apetito o que beban muchos líquidos. Todo lo que necesitas entender sobre la preconcepción, todas las etapas del embarazo y la crianza de tu bebé. Para estar al día y no perderte ninguna novedad en EROSKI Consumer, suscríbete nuestros folletines gratuitos.
